11 diciembre 2006

Paisajes del corazón, 1

Nubes, sol, prado verde y caserío
en la loma, revueltos. Primavera
puso en el aire de este campo frío
la gracia de sus chopos de ribera.

Los caminos del valle van al río
y allí, junto del agua, amor espera.
¿Por ti se ha puesto el campo ese atavío
de joven, oh invisible compañera?

¿Y ese perfume del hablar al viento?
¿Y esa primera blanca margarita?
¿Tú me acompañas? En mi mano siento
doble latido: el corazón me grita,
que en las sienes me asorda el pensamiento:
eres tú quien florece y resucita.

Antonio Machado

El corazón habla a través de sus propias metáforas y símbolos. Uno de sus grandes campos léxicos es el paisaje, la naturaleza como paradigma expresivo.

Y así el corazón habla en el otoño que atraviesa las islas, en el doloroso invierno sin rosas. Habla en la emoción que provoca el silencio que nos acaricia en el centro del bosque. Nuestra promesa de abril es nuestra juventud, la alegría es una flor desnuda, la soledad un desierto estridente. Lo salvaje la hermandad muda de las palmeras. Eres tú quien florece y resucita, como dice el poeta.

Y así la naturaleza adquiere otro valor: ser la palabra polisémica del corazón, pues a través de ella se expresa el mundo interior, todos los matices en tonos y graduaciones del universo anímico, continente inmenso, diminuto y frágil como la semilla que contiene el bosque. Pequeña simiente de inmensidades.

Las fotografías que acompañan a este comentario ahondan en esta misma idea, la naturaleza como elemento expresivo de lo emocional. Son una serie de 12 fotografías que he dividido en 3 partes. Ésta es la primera.



Publicado por JuanBM


8 comentarios:

La puta que no te parió dijo...

Acabás de hacerme recordar que por aquí es primavera aún, el calor ya la había disfrazado de verano, pero le quedan 10 días todavía.
Con vos es imposible quedarse con una frase o una imagen, es todo y ya!
Besos miles

Juan B. Morán dijo...

Hola Paula

Pues espero que disfrutes de la Primavera que te rodea (también en el corazón). Respeto profundamente tu decisión pero echo de menos tus palabras y tus ocurrencias.

Besos

Anónimo dijo...

Ahhhhh que maravilla!!! Llegar aquí y el corazón flota como una pluma!
Preciosas las letras Senghor, me quedaré un rato más para seguir disfrutándolas.
Un abrazo!

El argonauta enmascarado dijo...

Mientras dejemos que el corazón hable, seguramente seguiremos emocinándonos ante las imagenes que la naturaleza nos proporciona. Es, una vez más, la demostración de que esa máquina tan perfecta, transforma imagen en sentimiento.
Saludos.

Isabel Barceló Chico dijo...

Maravillosas imágenes. Mirar nos devuelve la vida.

Juan B. Morán dijo...

Gracias por vuestras palabras. Hace ahora un año que nació este blog y gracias a él he podido descubrir a otras personas que tienen tantas inquietudes, y realidades y aspiraciones que cumplir, compartiendo sus obras, pensamientos, fotos.... y el paisaje de fondo es que no somos islas cerradas.

Bueno, la dicha es mutua. Saludos y abrazos.

Reportera de interiores dijo...

Las fotos son preciosas, oníricas, emocionantes...

Ana

MarianGardi dijo...

Los paisajes del corazón.
Así se llama mi blog.
Buena entrada con este titulo.
Saludos incluidos los comentaristas